Qué ver en Santander
La capital de Cantabria tiene unos 172.000 habitantes, 300.000 contando su área metropolitana en torno a la bahía de Santander, una de las más bonitas del mundo, según la asociación internacional Club de las Bahías más Bellas del Mundo.
Hay muchas cosas que ver en Santander. La mejor manera de conocer la ciudad es a pie, ya que es pequeña y las zonas más bonitas y turísticas son llanas. Una de las opciones más recomendables es a través de un Free tour por Santander para conocer su historia, además de barata, ya que los free tours el precio es la voluntad, eso sí, es importante reservar la actividad, puedes hacerlo aquí.
La historia “reciente” de la ciudad tiene como episodio más oscuro el incendio de Santander en 1941. La tragedia asoló el centro de la capital en apenas 48 horas y, a partir de ahí, se construyó la Santander que hoy vemos. Si quieres saber más acerca del suceso al tiempo que conoces parte de lugares, lo recomendable es apuntarse al Free tour del incendio de Santander (fines de semana). O a su versión de precio fijo Tour del incendio de Santander (entre semana) por 8€/persona.
Los amantes de las leyendas e historias truculentas disfrutarán con el Tour de los crímenes y misterios de Santander por el centro histórico de la ciudad. Un recorrido por zonas como el Cabildo de Arriba, también conocido como el barrio chino de Santander, la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, la Plaza de Alfonso XIII, los Jardines de Pereda, y el Palacete del Embarcadero.
Otra opción para conocer Santander es sobre ruedas. Hay varias alternativas, entre ellas el alquiler municipal de bicicleta eléctrica, desde 2 euros. A través de TusBic puedes utilizar una de sus 200 bicicletas, distribuidas en 16 estaciones, ubicadas en diferentes puntos de la ciudad.
También puedes recorrer las principales calles de la capital en el Autobús turístico de Santander, desde 16 euros. Un recorrido comentado de 40 minutos, distribuido en 9 paradas, dentro de un autobús descapotable de 2 plantas. Recorre la bahía, la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción o el Palacio de la Magdalena.
Y para los más originales y retros, el Tour en Seat 600 por Santander, un paseo privado para hasta tres personas con conductor. Éste explica durante la hora y media del recorrido los orígenes de la ciudad, su pasado histórico y los acontecimientos más destacados, como el incendio de 1941. La plaza del Ayuntamiento, la catedral, la bahía, el puerto, las playas y el faro de Cabo Mayor son algunos de los lugares por lo que pasa.
La bahía de Santander y sus playas
La ciudad de Santander puede presumir de tener una de las bahías más bonitas del mundo. Por ello, es reconocida así por la asociación internacional Club de las Bahías más Bellas del Mundo. Solo 41 bahías poseen este distintivo, la única en España junto a bahía de Roses. Repartidas por 27 países, presume de galardón junto a las más famosas como la de San Francisco (EEUU), Agadir (Marruecos), False Bay (Sudáfrica), Ha Long (Vietnam) o Mont Saint-Michel (Francia).
Su extensión de 22,42 kilómetros cuadrados, gracias a la ría más grande del norte de España, se distribuyen en 9 kilómetros de largo y 5 kilómetros de ancho.
En la entrada de la bahía se encuentra la isla de Mouro, con sus faros, y la península de La Magdalena. Su espectacular Palacio de La Magdalena, residencia de estilo ecléctico, fue construida a principios del siglo XX como regalo para el rey Alfonso XIII.
Tras ella, las islas de La Torre y La Horadada. De las 14 playas con las que cuenta Santander, cuatro están en la bahía. Bikinis, frente al Paraninfo de La Magdalena, y a continuación La Magdalena, Los Peligros y La Fenómeno (o San Martín), una pequeña playa frente al Museo Marítimo que surgía con las mareas y que se ha establecido debido a la construcción de los espigones cercanos. Frente a éstas, se encuentra la playa de El Puntal, un arenal en forma de lengua de arena de 4,5 kilómetros y 150 metros de ancho con un sistema dunar en el centro, situada en Somo (Ribamontán al Mar).
La mejor forma de ver y sentir la bahía es con el Paseo en barco por la bahía de Santander, un recorrido de 1 hora que parte del Palacete del Embarcadero, en pleno Paseo Pereda. Además de ver todo lo que te hemos contado, este paseo guiado te cuenta la historia de la ciudad. Durante el recorrido se muestra El Sardinero, el faro de Cabo Mayor y la isla de Santa Marina, además de municipios de la bahía como Loredo y Somo. La zona del ferry y los cruceros, y el Centro Botín cierran un paseo súper recomendable.
También está la versión más ecológica con el Paseo en barco solar por la bahía de Santander. El catamarán eléctrico decorado por Okuda, parte del Dique de Gamazo, frente al Palacio de Festivales.
Para los más VIP está el Paseo en velero por la bahía de Santander, una experiencia de cuatro horas que zarpa desde el Puerto Deportivo Marina del Cantábrico, frente al aeropuerto, y que incluye café, almuerzo, bebida y un baño en la bahía para los que quieran.
La opción deportiva la tenemos con el Tour en kayak por la bahía de Santander. Una experiencia de hora y media en kayak individual o doble que comienza pasado el Museo Marítimo.
Los mejores miradores de Santander
En qué ver en Santander no pueden faltar los miradores.
Mirador del Río de la Pila
Un lugar donde poder disfrutar de la bahía santanderina es el Mirador del Río de la Pila, con una de las mejores vistas panorámicas de la ciudad y su costa. Este mirador se encuentra en una zona elevada de la parte antigua de la ciudad. Para llegar hasta él se puede hacer con las escaleras mecánicas que se encuentran distribuidas por las calles con más pendiente, o bien cogiendo el Funicular del Río de la Pila.
Mirador de la Duna de Gamazo o Duna de Zaera
Otro de los lugares preferidos por los viajeros para disfrutar de la bahía es la Duna de Gamazo o Duna de Zaera. Esta atracción turística se construyó con motivo del Mundial de Vela, celebrado en 2014, y que lleva también el nombre de su diseñador, el arquitecto Alejandro Zaera. Se encuentra frente al Dique de Gamazo, mirando a la bahía de Santander. La duna es una especie de grada convertida en mirador gigante al borde de la bahía. A su lado se encuentra el Centro de Vela Príncipe Felipe, uno de los nueve Centros de Alto Rendimiento que existen en España, y entre los top cinco dedicados específicamente a un deporte.
Mirador de Jardines de Piquío
Y sin salir de la ciudad también se puede disfrutar del Mirador de Jardines del Piquío situado en un pequeño parque en mitad del paseo marítimo del Sardinero, en Santander. Desde este paraje podemos disfrutar de las auténticas vistas a la playa del Sardinero, islas de Mouro y a su espalda, del gran Casino de Plaza de Italia.
Mirador de Peña Cabarga
Probablemente el mejor mirador de Cantabria. A unos 25 minutos en coche desde el centro de Santander, el mirador de Peña Cabarga está situado en la cima de Peña Cabarga, a 569 metros de altitud. Ofrece también unas inmejorables vistas de la ciudad y su bahía, sobre todo en días totalmente despejados. La panorámica abarca, por un lado, de Picos de Europa a Santander, y por el otro, de Santoña a Castro Valnera, en el límite de Cantabria con la provincia de Burgos.
Centro Botín
Inaugurado en 2017, el Centro Botín es un edificio modernista que alberga una importante colección de arte, así como actividades lúdicas y una pequeña zona comercial. Se ha convertido en un imprescindible en qué ver en Santander.
Su singular diseño, obra del arquitecto italiano Renzo Piano, y su ubicación, que se podría decir que está “sobre” la bahía, hacen de este edificio un referente de la ciudad.
Con la entrada al Centro Botín se pueden contemplar obras plásticas, esculturas, espacios innovadores e incluso música, con exposiciones de artistas internacionales y españoles. Además de acceder a todos sus rincones y miradores a la bahía y a los Jardines de Pereda.
Horarios del Centro Botín de Santander: abre de martes a domingo de 10:00 a 20:00 horas durante los meses de invierno y de 10:00 a 21:00 horas en verano. Los días 24 y 31 de diciembre el centro abre solo hasta las 17:00 horas. Todos los lunes del 15 de julio al 26 de agosto, de 10:00 a 21:00 horas. Reserva las entradas aquí.
Palacio de La Magdalena
En la península de la Magdalena, frente a la isla de Moruro, se alza la que fue durante 17 años (de 1913 a 1930) la residencia de verano de Alfonso XIII y Victoria Eugenia, el monumento más famoso de Santander. Si hay algo obligatorio que ver en Santander es esto.
Construido entre 1908 y 1912 por los arquitectos Gonzalo Bringas y Javier González de Riancho. Su interior está lleno de estancias palaciegas con numerosos objetos de valor que las decoran: Hall Real, Comedor de Gala, Salón de Baile, Sala Riancho, Sala Bringas, Salas de Audiencias, Aula de Infantes, Comedor de Infantes, Aula Biblioteca y Sala Duque Santo Mauro.
La Residencia Real costó construirla 700.000 pesetas de aquel entonces, aportadas por el Ayuntamiento de Santander, y numerosas familias, entre ellas Botín. El regalo de la ciudad al rey Alfonso XIII fue “recuperado” en 1977 por 150 millones de pesetas. El precio de venta, por parte de Juan de Borbón, Conde de Barcelona e hijo de Alfonso XIII, incluía la península. Mientras tanto, fue sede de la Universidad Internacional de Verano, hospital, residencia temporal para los damnificados por el incendio de 1941. Tras la rehabilitación de 1995, acoge congresos, actos, reuniones, y también bodas civiles. Además es la actual sede de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
Para no perder detalle, tanto del interior como del exterior, es muy recomendable la Visita guiada por el Parque y el Palacio de la Magdalena. El recorrido de dos horas incluye la península de La Magdalena, con el Museo del Hombre y la Mar donde está ‘La Balsa’, galeón utilizado por el aventurero cántabro Vital Alsar. También se visita el mini zoo, con leones marinos, focas y pingüinos, y el monumento a Félix Rodríguez de la Fuente.
En el recinto se pueden ver también las caballerizas, proyectadas en 1914 por González Riancho. Una especie de poblado inglés medieval de tejados puntiagudos y vertientes pronunciadas, entramados de madera vista, etc.
